Me encantas y me quiero más a mí. Cuento contigo. Eres la primera persona con quien cuento. Estoy aprendiendo a no exigir. Cuando digo que cuento contigo no significa que espere algo en concreto de ti. Cuento contigo pero no exijo a que respondas como, donde y cuando yo quiera.
Me encantas y me quiero más a mí. Estoy aprendiendo. Estoy aprendiedo a que cuando cuento contigo pueden pasar dos cosas: recibir o no recibir lo que me gustaría cuando estoy contando contigo. Ambas situaciones son posibles y son bienvenidas. Porque me encantas. Pero no exijo. Me encantas así. Y me quiero más a mí.
Estoy trabajando el hecho de entender que a veces no recibiré lo que quiero recibir cuando cuento contigo. Entonces, seguiré buscando lo que quiero recibir. Y me sigues encantando. Y me quiero más a mí.
Si tú no respondes como crees que yo querría, no te sientas mal. No. Eso sí que no. Me encantas y me quiero más a mí. Porque es así. Te encanto pero te quieres más a ti. Me encantas pero me quiero más a mí. Y no, no voy a darlo todo por ti porque me encantes, igual que tú no vas a darlo todo por mí. Voy a darlo todo por mí. Y nos encantamos, y es así. Lo sé.
Creo que estoy aprendiendo. Y estoy orgullosa de mí.